La consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural en funciones, Elena Víboras, recalcó ayer la necesidad de contar con "un mayor esfuerzo privado en comercialización y promoción" para los productos de denominaciones de origen (DO) e indicaciones geográficas, y abogó por "aunar esfuerzos" entre zonas productoras "para optimizar recursos y promocionar de forma conjunta". Víboras hizo esta reflexión durante la inauguración del VII Congreso de la Asociación Origen España, que se celebró ayer en Villanueva de Córdoba.
La responsable autonómica destacó que la calidad de las producciones agroalimentarias es uno de los "instrumentos más poderosos que tienen los agricultores y ganaderos europeos, pues se convierte en un marchamo de calidad mundial para nuestros productos". Y Andalucía, recalcó Víboras, "por nuestra gran variedad de alimentos de calidad y el esfuerzo conjunto realizado es actualmente la primera comunidad autónoma de España en número de denominaciones de calidad". En concreto, 58 denominaciones de origen e indicaciones geográficas de productos agroalimentarios, 25 denominaciones vínicas y una de bebida espirituosa. En 2013, el conjunto de las DO e indicaciones geográficas andaluzas generaron más de 346 millones de euros de valor comercializado.
Entre los productos amparados con este tipo de menciones destaca el aceite de oliva, ya que alrededor de un tercio de la superficie productiva está reconocida por alguna de las 12 DO de aceite de oliva extra que hay registradas. Un peso importante tienen también, entre otros, los productos pesqueros andaluces amparados con estas figuras de calidad; la miel de Granada, la segunda de España en valor comercializado, y los jamones y paletas, que aportaron 30 millones de euros en 2013.
Víboras se refirió a la apuesta europea para amparar las producciones con este tipo de menciones, ya que consigue un triple objetivo, "ofrecer garantías acerca del origen y los métodos de producción, establecer un medio para mejorar las posibilidades de promoción y proteger los productos frente a imitaciones". De esta manera, añadió, "no sólo sirven para distinguir nuestros productos y proteger su buen nombre, sino que suponen también una garantía adicional para los consumidores".
Los productos que están calificados por un consejo regulador cuentan con rigurosos controles de trazabilidad y calidad e incluso condiciones más exigentes que otros que no están amparados por ninguna denominación. Asimismo, la consejera subrayó que para construir valor en torno a cualquier marca es necesario invertir en promoción y difundir sus cualidades, para lo que van a contar siempre -dijo- con el apoyo de la Junta de Andalucía, "que ha puesto en marcha incentivos especialmente dirigidos a los consejos reguladores para la promoción de este tipo de productos dentro de nuestro programa de desarrollo rural".
Abogó, además, por "aunar esfuerzos" entre zonas productoras. Con esta finalidad y para favorecer este tipo de acciones, desde la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural "estamos apoyando con mayor intensidad las actividades promocionales en las que cooperan varios consejos reguladores". Asimismo, el nuevo Programa de Desarrollo Rural de Andalucía 2014-2020 priorizará también las actuaciones conjuntas.
La consejera puntualizó, por último, que "aún queda mucho por hacer para mejorar la comercialización de este tipo de productos, sobre todo de forma conjunta" y ha animado a afrontar este reto desde una perspectiva más innovadora, "aprovechando la ventaja que nos ofrecen las nuevas tecnologías. En este sentido, la Asociación Origen España puede ser un magnífico catalizador para impulsar este tipo de iniciativas, que den una mayor visibilidad a nuestros productos en el exterior", concluyó.
Fuente: eldiariocordoba.es